el niño de las pinturas

martes, 22 de enero de 2008

Érase una vez un pequeño niño perdido. Buscaba bajo las piedras y tras su sombra pero nunca se encontraba. Jugaba con las estrllas y susurraba a las nubes secretos que guardaba el viento. Preguntaba a las montañas más altas y a los viejos más viejos, pero nadie le daba respuesta.
Un día saltaba de planeta en planeta recogiendo sueños cuando tropezó con una lata que sonaba a cascabel. La cogió y pulsó su cabeza y una gran llama de color lo inundó todo y ya el suelo no era suelo ni el cielo, cielo, todo era color, el color era todo. Lo miró y perdió su vista en él. El niño estaba maravillado. De repente un brillo le hizo cerrar los ojos, y cuando los abrió vió un pequeño niño frente a él, mirándole.

- ¿Quién eres?- le preguntó. El pequeño niño sonrió y tocó su mano.- Soy tu sonrisa - dijo suavemente mientras se conventía en luz y se fundía con su brazo, con su hombro, con él. El pequeño niño perdido suspiró y miró arriba, sonrió y sintió al viento decirle algo bonito.

Desde aquel día el niño sigue saltando de planeta en planeta cazando sueños y dando color a su camino, y de esta manera se refleja

se busca

se encuentra.


Para saber más

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